El pasado fin de semana tuvo lugar la convivencia de Poscomunión del segundo trimestre

52 fueron los valientes que se animaron a esta convivencia, entre monitores y niños, todos con mucha ilusión y con muchas ganas de pasarlo bien. No se exactamente la correlación entre la afonía y el pasarlo bien, pero en este caso fueron de la mano. Comenzamos el viernes con una preciosa película que nos hablaba de superación, de amistad y de que todo se puede juntos: "Elegidos para la gloria". Y la primera noche, como dice el Génesis, "pasó un día pasó una noche, día segundo", y qué noches. Finalmente los ángeles cayeron en brazos de Morfeo, pero costó lo suyo.

Al día siguiente, después de una bonita oración en la capilla del Centro San Juan de Dios, a jugar todos a la Oca. Una megaoca con todos sus puentes, ocas, casillas... y a correr por los jardines. Los chavales disfrutaron mucho de esta actividad que ya es un clásico en estas convivencias. Tuvimos también por la mañana una sesión de baile y aprendizaje de danzas, y el futbito, que les vuelve locos y que llena todos los tiempos muertos que pueda haber. 

Por la tarde, fuimos a Laguna de Duero, y allí, en torno al templo parroquial y al a plaza Mayor, hicimos un bonito juego cultural, donde los chavales buscaron pistas, interactuaron con la población, merendaron nocilla como mandan los cánones y lo pasaron estupendamente. Pensábamos que la caminata les iba a cansar, pero no fue así. 

Y por la noche, don Carlo Gambino y don Giuseppe Bonanno, en una trama de "La cosa nostra" calabresa, con todos los personajes de la mafia... a resolver la muerte del hijo mayor, Gaetano Bonanno, a causa de 18 tiros a quemarropa. Un cluedo trágico que los monitores ambietaron estupendamente y en el que los chavales terminaron descubriendo el asesino, el arma homicida, el lugar el crimen y el móvil. Una galería de personajes siniestros Onorata Società la "mamma", Mariangela Trapani "la padrona" con sus dineros, Angelo Bonanno empeñado en la vedetta, Bonie Parker, Carlo Colombo el abogado, Nicoletta Montefalco "la figlia", Francesco Costello entre rejas, y Giulia Traditora, la más glamurosa. No era tan fácil, y casi nos dan las dos. A esa dichosa hora, los ángeles dormían, soñando con metralletas y mafias. En fin, se puede dormir de cualquier manera.

Al día siguiente, después de limpiar y recoger la casa de San Juan de Dios, recibimos a los padres y madres y abuelos que vinieron para la eucaristía. Una grata sorpresa fue que en San Juan de Dios no había sacerdote, y nos pidieron que si podían ir los chavales suyos a misa con nosotros. Y nosotros encantados con esos "campeones". Nunca tuve mejores monaguillos y homilía más participada. Atentísimos que estaban todos. Los padres también, y además encantados con esa suerte de integración que salió el último día para la misa. Uan vez más hicimos posible ese milagro de hacer de la parroquia "familia de familias".

Hay que decir que estas actividades serían imposibles sin los monitores, jóvenes que renuncian a "su" fin de semana para estar con los más pequeños y que lo dan todo, y que son incansables. Gracias a estos monitores por la creatividad, la flexibilidad, la capacidad de improvisar... gracias por darlo todo.