Queridos hermanos y laicos de la Familia pavoniana,
El mes de mayo, junto con el mes de abril, constituye un periodo particularmente intenso en el actual año para nuestra “Familia”. Podemos considerarlos los dos meses “pavonianos” por excelencia en base a los acontecimientos que se refieren a nuestro Padre Fundador: desde los aniversarios de su muerte y de su beatificación, hasta su fiesta litúrgica. Desde esta perspectiva, dentro de este “Año de la misión educativa pavoniana” que estamos celebrando, quiero seguir proponiéndoos una reflexión sobre la experiencia que llevó al p. Pavoni a realizar la misión educativa que todos conocemos. “Los dulces atractivos”, a los que me referí en la carta del mes pasado, lo llevaron a asumir una situación dramática en que se encontraban muchos adolescentes de su ciudad.
«He aquí que se produce el naufragio» (Introducción al Reglamento del Instituto, 1831)
La situación de esos muchachos evoca en el p. Pavoni la imagen del naufragio. Estos adolescentes corren el riesgo de perderse, de arruinar su vida.
¿A quién se refiere el Padre Fundador? A los adolescentes obligados, por su condición de pobreza y abandono, a afrontar prematuramente el mundo del trabajo, donde no existe ninguna atención ni hacia ellos. Junto con la explotación de sus frágiles energías, es sobre todo su corazón el que es maltratado, y su dignidad la que es pisoteada. La primera virtud que se derrumba es la de la castidad. Abierta esta brecha, se desploman fácilmente otros muchos valores humanos, morales y religiosos. Estos muchachos se apartan de las prácticas religiosas, no quieren saber nada de los consejos de personas interesadas por su bien, se entregan al vicio y llegan a la delincuencia.
Entre éstos están también algunos adolescentes de su oratorio. El p. Pavoni habla de ellos en la Idea general, el “prólogo” de sus Constituciones de 1847. Después de describir el éxito de su oratorio, abierto en 1812, sigue diciendo: «Sin embargo, posteriormente, no pocos de ellos, obligados a trabajar en algún oficio, por necesidad de su condición, menguaban en fervor y se desviaban del buen camino, inducidos por el mal ejemplo que se da en una buena parte de los artesanos y por las ideas libertinas que imperan incluso en los más humildes talleres».
Es una descripción muy sintética de lo que más extensamente ya había tratado en la Introducción al Reglamento del Instituto, de 1831. El mal ejemplo y las palabras libertinas tenían las de ganar. Ante esto, añade el p. Pavoni: «Estas dolorosas pérdidas herían de tal modo el corazón sensible del Sacerdote Director de la Congregación [oratorio] ...».
Pavoni habla de sí mismo en tercera persona. Es él, es su corazón sensible el herido por estas dolorosas pérdidas. El p. Pavoni siente su corazón herido. Discretamente manifiesta los sentimientos de su corazón: un corazón sensible al malestar de los jóvenes, un corazón que se siente herido por sus fracasos, por su ruina. «Preocupado por esos sentimientos», continúa en la Introducción al Reglamento del Instituto, se sintió «movido por un ardiente deseo de ser útil a estas criaturas desdichadas».
Sabemos lo que va a hacer el p. Pavoni. Me interesa aquí detenerme en su reacción ante el “espectáculo” que tenía delante. No se queda en la indiferencia, no vuelve el rostro hacia otro lado. Se siente profundamente preocupado por estos jóvenes náufragos; se siente movido por un ardiente de seo de salir a su encuentro, de hacer algo por ellos, de ayudarlos a construir su futuro.
En esto todos nosotros somos interpelados. Más allá de lo que estamos haciendo, es necesario que nos preguntemos qué resonancia tiene en nosotros la situación actual del mundo de los jóvenes.
Este es nuestro mundo, el mundo al que estamos enviados, el mundo en que estamos implicados.
Podemos limitarnos a condenar lo que no funciona. Podemos quedarnos en la incomprensión de los problemas de los jóvenes. Podemos sentirnos impotentes ante tantas situaciones de desazón. Incluso podemos no ver todo lo positivo que existe. Podemos cerrar los ojos ante la realidad compleja y quedarnos con algunas acciones parciales e insuficientes.
Nuestro Padre Fundador nos empuja a ponernos delante de los muchachos y de los jóvenes con una actitud de empatía, poniendo siempre en ellos, a pesar de todo, «las más hermosas esperanzas». Tratar de entender, preocuparnos de sus angustias, de sus deseos, de sus dificultades, de sus sueños, de sus esperanzas. Sostenerlos en la construcción de su futuro. Ver cómo llegar a su corazón. Actuar por su formación integral, como hombres y como cristianos. Darnos cuenta de las “trampas” en que fácilmente pueden caer, empezando por la banalización de la sexualidad. También hoy una educación auténtica en la virtud de la castidad puede constituir la clave de un desarrollo seguro y responsable a todos los niveles. Educar en el amor verdadero es un enorme reto en un mundo empapado (al menos por lo que aparece de manera más provocadora) de hedonismo, de egoísmo, de búsqueda del éxito y del placer personal. Educar en la madurez como capacidad de hacer de la propia vida un don, el don más grande posible, a la luz de la fe en el Señor y con la ayuda de su gracia. Dentro de las actividades que llevamos adelante, ¿es esto lo que intentamos? ¿Es lo que realmente nos preocupa? Creo que esto es lo que nuestro Padre Fundador nos pide hoy, aun en las circunstancias tan diferentes en que vivimos.
24 horas de adoración continua (26 de mayo) y fiesta litúrgica del beato Ludovico Pavoni (28 de mayo)
También este año la fiesta litúrgica del 28 de mayo estará precedida por una cadena de oración en nuestras comunidades, constituida por las 24 horas de adoración continua del 26 de mayo (cf. Anexo). Es el día de la vigilia de Pentecostés. Por tanto la adoración continua tendrá un significado y un valor aun mayores al estar unida a la oración de toda la Iglesia en la invocación del Espíritu Santo.
Junto con las intenciones de los años pasados (la oración para llegar a la proclamación del p. Ludovico Pavoni como santo y para obtener el don de nuevas vocaciones para la Congregación), se añade este año un renovado compromiso en la aplicación, en todas nuestras actividades, del “Proyecto educativo pavoniano”, inspirado en el ejemplo y la enseñanza del Padre Fundador y adaptado a las circunstancias y necesidades del mundo juvenil actual.
Agenda
En estos primeros días del mes se han programado dos encuentros en Belo Horizonte, Brasil: el de los superiores de comunidad (1 de mayo) y el de formadores (2 de mayo).
El viernes día 4, en Brescia se desarrollará, como ya se ha comunicado, el tercer “Gio-Fest Pavoni”.
El día 7, lunes, partiré hacia Filipinas, donde el novicio Efrén emitirá la primera profesión religiosa el domingo día 13. Después ingresarán en el noviciado otros cuatro jóvenes: Marcos Dias de Sales, Roberto Capanpan Custodio Jr., Rustom Donas Bayudang y Ziad Mark Baggas Dao-ayan. Demos gracias al Señor por estos acontecimientos y pidámosle que mantenga a todos en la fidelidad a la llamada y a su amor.
En España, entre el 21 y el 27, se celebrará la semana vocacional pavoniana, que se concluirá el sábado 26 con la IX marcha pavoniana juvenil a Colmenar Viejo (Madrid), y el domingo 27 con la jornada de la misión pavoniana.
Entre el 23 y el 25 participaré en Roma en la 79ª asamblea semestral de Superiores generales (USG), que tendrá como tema: “La vida religiosa en América Latina y Caribe: vida y misión”.
En estos días del tiempo pascual y del mes de mayo nos acompañe la Virgen María, «nuestra querida Madre»; interceda para que sepamos ser como ella, atentos a la palabra de Dios y dóciles a la acción del Espíritu Santo.
Os saludo cordialmente en el nombre del Señor.
P. Lorenzo Agosti
Tabella per la “24 ORE NON STOP ADORAZIONE” 2012
00:00 Vitória / São Paulo 19:00
01:00 Brasília / Elói Mendes 20:00
02:00 Belo Horizonte 21:00
03:00 Bogotá 20:00
04:00 Villavicencio 21:00
05:00 Asmara PSC 06:00
06:00 Asmara Casa di formazione 07:00
07:00 Brescia Pavoniana
08:00 Brescia Parrocchia / Montagnana
09:00 Sarno / Pavia
10:00 Roma San Barnaba
11:00 Patos de Minas 06:00
12:00 Pouso Alegre 07:00
13:00 Gama 08:00
14:00 São Leopoldo / Manila (20.00) 09:00
15:00 Monza
16:00 Genova
17:00 Tradate / Milano (Crespi / Parrocchia)
18:00 Trento / Saaba
19:00 Lonigo / Valladolid
20:00 San Sebastián / Albacete
21:00 Àncora (MI – ROMA)
22:00 Cáceres / Madrid
23:00 Lagos de Moreno/ Atotonilco 16:00
Tradate, 1 de mayo de 2012, memoria de san José obrero.