El lema de este año fue “Palomas de la paz”

Festival de las Cometas 2022

“Palomas de la paz”

El pasado 15 de agosto, solemnidad de la Asunción de la Virgen María al Cielo, y lunes festivo en Colombia, tuvo lugar, en el mirador de Sauces de Miravalle, barrio de nuestra parroquia Cristo de la Paz en Bogotá, el TERCER FESTIVAL DE LAS COMETAS, organizado por el grupo juvenil “Unidos por Pavoni” y algunos chicos de nuestro grupo prejuvenil parroquial “Huellas juveniles”.

El lema de este año fue “Palomas de la paz” y hacía relación al nombre de nuestra parroquia “Cristo de la paz” y al Festival de las cometas que, al igual que las palomas, también suelen utilizarse como símbolos de la paz. Además este año los jóvenes quisieron que el Festival fuera una réplica de los Talleres de “Paz a lo bien” que están recibiendo quincenalmente, en la casa pavoniana, por parte de la ONG católica FICONPAZ.

El Festival implicó varios sábados de preparación: carteleras, permisos, publicidad, juegos, rifas, boletas de las cometas,… y la verdad tocó correr un poco porque “la mies era mucha y los obreros bien poquitos”. Sin embargo, al final, gracias a Dios, todo estuvo listo y pronto para disfrutar de un Día de integración familiar espectacular.

Y es que el objetivo principal de estos festivales y convivencias es Integrar a la comunidad parroquial y los jóvenes programan estos espacios como una Misión al servicio del Reino de Dios o una Oportunidad para la Evangelización.

Los preparativos del día 15 comenzaron a las 9 a.m. colocando la ambientación (carteleras y sonido) y organizando los stands de los diversos juegos. Por la mañana estaba como zaraceando, con un viento y un aire del páramo del Sumapaz que dejaba las orejas y las narices medio tiritando. Gracias a Dios llegaron los 6 pollos asados que regaló FICONPAZ y eso devolvió a los jóvenes las fuerzas y la esperanza.

Pensábamos que con ese clima no se iba a acercar nadie y así fue… hasta la 1 o 2 p.m. que gracias a Dios el día aclaró. Milagrosamente el Señor nos regaló una tarde soleada que nos achicharró, pero que animó a las familias a sacar su cometa y ponerla a volar porque también había viento suficiente para elevar muy alto las cometas.

Los diversos juegos (boli-rana, dardos, monedas, dibujos, penaltis, quemados y la ramita de olivo) se llenaron de niños y familias, el cielo se fue dibujando de cometas y además se terminaron todas las rifas,…

También en el Concurso de baile se animaron muchas parejas (¡Y es que el baile es una tentación irresistible para la mayoría de los colombianos!).

La segunda finalidad del festival era Concientizar a las familias sobre la importancia de educar para la paz con las palabras y el buen ejemplo; y por eso, a eso de las 5 p.m., el H. Jesús dio un pequeño Discurso sobre la paz y agradeció a Dios y a toda la comunidad su asistencia al Festival y el apoyo económico prestado a los jóvenes “Unidos por Pavoni”.

La tercera finalidad del festival era Recaudar fondos para el Campamento Juvenil que se celebrará Dios mediante del 9 al 12 de diciembre en Villavicencio junto con los chicos del grupo juvenil de Villavo. Los juegos, las rifas, las boletas de las cometas, el concurso de baile,… todo requería el pago de un pequeño aporte de los concursantes. Al final, después de descontar los gastos, supuso un ingreso total de unos 400.000 pesos, que para el recaudo de una tarde de trabajo no está nada mal.

La gente se animaba no solo porque les gustaba participar en las diversas actividades, sino porque además se podían llevar muchos premios sorpresa: juguetes, mercados, balones,… que otras personas generosas nos habían donado.

Como en todo encuentro de integración, siempre hay algunas cositas que mejorar, pero en la breve evaluación que hicimos entre todos, se dijo que había sido un EXCELENTE FESTIVAL y que el próximo año debemos repetir este maravilloso evento preparándolo con más tiempo, etc.

Nada más. Eso es todo, amigos. Termino agradeciendo a Dios, a las familias de nuestra parroquia y a todos los chicos “Unidos por Pavoni” que nos regalaron, un año más,… un día imposible de olvidar.