El pasado 15 de marzo, hemos tenido un encuentro chavales y padres

En el grupo de jóvenes (los que ya se han confirmado), planteamos el pasado 15 de marzo una miniconvivencia con los padres y los chavales. Fue un momento muy rico en matices que pensamos repetir en otras ocasiones. Los chavales, con la disponibilidad que les carateriza respondieron a esta cita, y un número bueno de padres y madres. Ángel, nos planteó algunas pistas para el diálogo. Comenzó citando a José Antonio Marina: en toda educación tiene que haber tres cosas necesarias, límites, cariño y comunicación. Y así, con este preámbulo, fueron desfilando los diferentes temas que nos preocupan a todos: salidas, noches, adicciones, bebidas, sexualidad, estudios, amigos... y los jóvenes expresándose con una gran madurez y los adultos intentado ponerse en su lugar. Una experiencia muy rica que a todos nos ayuda a hacer "parroquia, familia de familias". 

A continuación, los padres sacaron ricas viandas, toritillas, kiches, empanadas... y postres para quitar el hipo a cualquiera. Vamos una cena en toda regla.

Y como no querían marcharse, realizamos un precioso y trepidante cluedo, padres e hijos: "La sonrisa del payaso", terror en el circo. Los padres, como no sabían muy bien cómo funcionaba, se dejaron guiar por los hijos. Felicitar al cuadro de actores que, ataviados y bien preparados, convirtieron la parroquia en un circo, con animales, magos, trapecsitas, y toda suerte de elementos circenses. Hubo un equipo ganador, muy competitivo por cierto, que descubrió qué había pasado con Sara, la niña desaparecida. Gracias a los padres por su confianza incondicional en la parroquia, a los hijos por la respuesta tan positiva, a los catequistas y al cuadro de actores del cluedo. Con vosotros da gusto!!