Sobre el torno de Fútbol Siete con motivo de la fiesta de la Inmaculada en Bogotá

Estimada Diana que a través del IDRD nos ha prestado la cancha sintética de Miravalle, estimado público que nos acompaña y animará este Encuentro, estimado árbitro y queridos jóvenes que han aceptado la invitación para participar en el Torneo de Fútbol 7 “Inmaculada 2018”. Sean todos bienvenidos y bendecidos por el Señor.

Los Hijos de María Inmaculada, también conocidos como Religiosos Pavonianos, que llevamos 23 años animando la Parroquia Cristo de la Paz y la Fundación San Ludovico Pavoni, hemos querido organizar este torneo en el día de la Solemnidad de la Virgen Inmaculada, para honrar a nuestra querida Madre del cielo, nuestra patrona y protectora. Ella es ejemplo de pureza, juventud y fecundidada la vez. También queremos recordar a nuestro padre Fundador San Ludovico Pavoni, el amigo de los jóvenes y de los pobres.

Además, con este Torneo de fútbol, queremos aprovechar la gran afición que tienen los jóvenes a este deporte para unir a los chicos de los diversos barrios de nuestra parroquia y de las parroquias de nuestro arciprestazgo. Son necesarios estos espacios para conocerse, hacerse amigos y juntos trabajar por la construcción del Reino de Dios aquí entre nosotros.

Sabemos que hay mucha injusticia en nuestro mundo y que a los jóvenes casi siempre les toca la peor parte. Pero la mejor forma de luchar contra esa injusticia y desigualdad no es lanzando piedras y manchando muros, como algunos han hecho en las pasadas manifestaciones; tampoco refugiándoos en las drogas, el sexo y el alcohol y mucho menos pasando indiferentes por la vida, sino conociendo más el mensaje de Jesucristo y poniéndolo en práctica. El mensaje de amor de Jesús es capaz de transformar todas nuestras realidades.

Por ejemplo, Ludovico Pavoni, que era un joven de familia rica, se puso en las manos de Dios y fue capaz de dejar todas sus riquezas y entregar su vida a los jóvenes pobres y abandonados. Se ordenó sacerdote y fundó una Congregación religiosa y gracias a Dios en estos 200 años de existencia de esa Congregación miles de jóvenes pobres, huérfanos, drogadictos, abandonados,… han sido promocionados y salvados de las garras del maligno.

Como ven, chicos, la fe mueve montañas. La fe activa de Ludovico Pavoni ha dado nueva vida a muchos jóvenes a lo largo de la historia, en muchos países del mundo y aquí en Colombia, en Villavicencio y Bogotá. También ustedes pueden, con fe, con la ayuda de Dios, transformar este mundo. No se cierren a sus propios egoísmos. No piensen solo en su propio bienestar. Piensen sobretodo en tantos jóvenes que están con problemas familiares, de droga, prostitución, pornografía, violencia, alcohol,… y sean valientes para recorrer el mundo haciendo el bien, tras las huellas de Jesús de Nazaret, de María y de San Ludovico Pavoni.

Pero es importante que formen equipo, que trabajen en equipo, porque incluso D. Quijote siempre iba acompañado de su fiel escudero Sancho Panza para lanzarse a “desfacer entuertos” y derribar fieros gigantes.Y nuestro Señor Jesucristo eligió a los 12 apóstoles y formó a la Iglesia para que juntos nos apoyemos y nos lancemos a evangelizar nuestro mundo.

Para terminar mi discurso solamente recuerden que todos somos amigos y éste es un torneo amistoso. Suden la camiseta, corran, peleen el balón,… pero siempre utilizando el juego limpio, sabiendo que “en la vida como en el deporte, lo importante es participar”.

Y como diría Bugs Bunny, el conejito de Disney “Eeeso es todo, amigos”. Amen mucho a Jesús y ala virgen Inmaculada y poniéndose en sus manos comiencen ya desde hoy a trabajar en la increíble aventura de la Construcción del Reino de Dios.

La bendición para todos ustedes, feliz Torneo Inmaculada 2018, y que gane el mejor.

Un aplauso para Jesús, para María y para todos ustedes y ojalá nos vemos más a menudo en sus parroquias o en la nuestra. Un abrazo y… que Viva la Virgen Inmaculada y el Torneo pavoniano.


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