El tema fue la promoción de las vocaciones que el último Capítulo General calificó como la “Prioridad de prioridades”.

XIX CONVIVENCIA DE LA FAMILIA PAVONIANA DE COLOMBIA

LA PROMOCIÓN DE LAS VOCACIONES: “PRIORIDAD DE PRIORIDADES”.

El pasado lunes 13 de Noviembre, festivo en Colombia, se realizó en el Centro Juvenil Pavoni de Villavicencio, la XIX Convivencia de la Familia Pavoniana de Colombia. El tema fue la promoción de las vocaciones que el último Capítulo General calificó como la “Prioridad de prioridades”.

Los de “Villavo” comenzamos a preparar todo: almuerzo, adornos, aseo, mesas,… desde las 6 a.m., mientras que los de Bogotá salieron a las 5,30 a.m. para llegar aquí a las 8,30 a.m. puntuales.

Después del recibimiento y la alegría del reencuentro, tomamos un rico chocolate con pan y queso que sirvió de desayuno. La oración inicial estuvo a cargo de los jóvenes de “Villavo” con batería, órgano, guitarra, etc. Ellos nos invitaron a servirnos de cada uno de nuestros dedos de la mano para hacer oración. Muy originales. Felicitaciones chicos.

A las 10 a.m. fue el momento de las diversas exposiciones: Inició el p. Vittorio hablándonos de la pastoral vocacional en el Capítulo general y en la Consulta general. Después el p. Javier Olmedillo, que estaba de visita pastoral de nuestras comunidades, nos habló de la importancia de crear procesos vocacionales. El hermano Jesús, expuso la pastoral vocacional realizada en Villavicencio. Le siguió el p. Daniel que nos habló del trabajo que se realiza en Bogotá y por último algunos laicos nos hablaron del próximo Sínodo de los jóvenes, nos animaron y aseguraron que “Dios no abandona a su pueblo y a sus amigos y a los que se convierten de corazón”.

Posteriormente hubo  un tiempo de refrigerio y descanso para pasar después al trabajo de grupos a los que el p. Vittorio lanzó tres preguntas:

-          ¿Por qué el Capítulo general  nos propone la pastoral vocacional como “prioridad de prioridades”?

-          ¿Por qué no hay continuidad de los jóvenes ente los religiosos y el en el núcleo de los laicos  pavonianos?

-          Propuestas e iniciativas para fortalecer la comunidad religiosa y el núcleo de los laicos.

Los grupos respondieron que la “Prioridad” es porque “la mies es mucha y los obreros pocos”. Todos debemos estar convencidos  de que hacen falta más religiosos y laicos pavonianos para responder al grito de los jóvenes pobres y abandonados de nuestro tiempo. Hay que continuar creando grupos infantiles, juveniles y de adultos propiamente pavonianos, ya que todas las vocaciones son el resultado de un largo proceso. En nuestras parroquias hay que hacer más énfasis en una pastoral vocacional pavoniana explícita y de comunión. Debemos implicarnos todos con fe, alegría y esperanza. Hay que acompañar a los jóvenes con su lenguaje, su tiempo, sus ritmos, el internet, el arte, los deportes,… Observar lo que piensan y hacen, qué les entusiasma, qué les repudia,… Llamarles, invitarles, confiar en ellos, promocionarles, estar con ellos y llevarles a la fe en Cristo resucitado y resucitador. Los jóvenes quieren una oración, una liturgia y una Iglesia joven pues “nunca harán lo que a ellos no les gusta o no les llena”. Los jóvenes buscan autenticidad, escucha, diálogo y comprensión. Se hablaba de la importancia de hacer un mayor seguimiento vocacional de los jóvenes que muestran cierta inquietud y trabajar más unidos a las familias de esos jóvenes.

Después de la puesta en común tuvimos el almuerzo: un rico arroz con pollo que nos prepararon los de “Villavo”. Luego tiempo de descanso, preparación de la misa por grupos y una eucaristía muy bonita en el kiosco del Centro Juvenil.

Nos decía el papa Francisco que “Donde hay vida, fervor y ganas de llevar a Cristo a los demás, surgen vocaciones genuinas” (E.G.: 107). La labor no es fácil pero si tenemos fe en el Señor Él sabrá multiplicar nuestros cinco panes y dos peces en alimento abundante para todos. Oremos pues con fe al Dueño de la mies, para que envíe obreros a su mies. Y tú joven que estás leyendo este artículo: No tengas miedo, confía en Dios y lánzate a sus brazos en busca de la Paz y la Verdad.