Un espacio para el encuentro, la creatividad y la amistad

Comenzábamos este curso con un interesante taller "de miedo". Natalia, una joven del grupo Saiano de Vicálvaro, nos enseñaba a hacer un esqueleto "con mucha marcha". Los niños disfrutan mucho en esta actividad y los monitores también, que tienen la oportunidad de echarles una mano y compartir los talentos que Dios les ha puesto en su vida...

Después del taller, ya se sabe, se pone música, se enciende la wi, se abre el kiosco y aparece "un jaleillo" de gritos, sonrisas y mucha, mucha vida...

Agradecemos a Natalia su siempre buena disposcición y su sincera disponibilidad. Agradecemos a Dios estos bonitos encuentros... por cierto hoy con la visita de nuestro padre Provincial.