Iniciado ya el mes de Junio, la XIV Marcha Juvenil a Colmenar Viejo

Este año, al caer tan tarde la Pascua, y entre actividades de las diferentes comunidades y otros compromisos, se nos fue la fecha de la Marcha, y hubo que ponerla después de la Fiesta de San Ludovico Pavoni. Es la primera vez que celebramos la Marcha después de esta fiesta, pero también tuvo un sentido especial, mariano por ir a la Virgen de los Remedios de Colmenar Viejo, y pentecostal, por la víspera de la Pascua del Espíritu Santo.

62 fueron los participantes, venidos de Cáceres, Albacete, Vicálvaro y La Cistérniga, que recordaron la historia de Pavoni de tantas maneras, a través de la mímica, el cuentacuentos, los objetos de Pavoni... Iniciamos como siempre en la ermita de San Francisco, recordando que "hay historias que merecen un bis", es decir que merecen ser repetidas y actualizadas. Es es la historia de Pavoni, la historia de nuestros grupos y queremos también que sea la historia de cada uno: una historia digna de ser vivida y de ser repetida. Este año, con el icono nuevo de Pavoni, nos pusimos en camino hacia la ermita de la Virgen de los Remedios. El calor y el tiempo, respetándonos. El camino lleno de sorpresas: el recuerdo de la historia de Pavoni con las fmaosas telas, la historia de nuestros grupos, la historia de cada uno... y lo importante que es "dejar huella", es decir dejar nuestra impronta Saiano en los lugares y grupos donde nos encontramos. 

La comida, como siempre, un festín bajo los árboles de la pradera, un partidillo de fútbol, el pañuelo, y la eucaristía participada por todos y vivida con intensidad, donde hicimos memoria de San Ludovico Pavoni. Nos despedimos con un poco de pena, pero con la alegría de habernos vuelto a ver, hasta la próxima experiencia que será en los campamentos de verano, y en la convivencia de noviembre.