En Vicálvaro con la presencia de nuestro arzobispo Don Carlos Osoro

Un día pasado por agua y sin embargo un gran día en el que uno se siente un poco más pavoniano... orgullosamente más y mejor pavoniano... y eso no es malo...

No entrábamos en el templo, con una presencia significativa de niños y, especialmente, de jóvenes (les agradezco inmensamente, pues demuestran cómo se sienten saianos, pavonianos...) y cientos de adultos. Presidiendo la Eucaristía nuestro arzobispo Don Carlos Osoro. En la homilia respasó acertada y didácticamente la vida de san Ludovico Pavoni. Puso énfasis en nuestro carisma, los niños y los jóvenes y en el espíritu de familia que debemos seguir cultivando como pavonianos. Finalmente, y a través de los verbos escuchar, llenar y acoger respasó las lecturas del día. 

Una vez concluida la Eucarístía, y en el salón parroquial, tomamos un pincho, festejando a nuestro nuevo santo. Finalmente la comunidad junto a los parrocos y nuestras hermanas de la Presentación y por supuesto Don Carlos, arzobispo de Madrid y Don Alfonso, vicario episcopal, comimos juntos en un ambiente de mucha cercanía...

Agradecemos a Dios el regalo que nos ha hecho en Pavoni. A Don Carlos Osoro por su presencia, su cercanía y sus palabras. A Don alfonso y a todos los que han participado de esta bonita celebración.