A los que puedan gastar 5 minutos consultando internet, les aconsejo que lean completa la historia d

A los que puedan gastar 5 minutos consultando internet, les aconsejo que lean completa la historia de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá. Como todas las historias de Milagros de la Virgen ésta también es tiernísima y llena de fe. Yo solamente les he copiado un trocito para adelantarles el trabajo: 

La historia se remonta al siglo XVI cuando los frailes dominicos realizaban expediciones de evangelización en la región del centro del país. Un caballero proveniente de España, Antonio de Santana, en 1560 obtiene la encomienda de la región para levantar una casa dotada con diferentes dependencias, apropiada para la administración de los colonos, los indígenas y esclavos; además debía construir una capilla para oficios religiosos en Suta. Posteriormente de España llega un fraile colaborador en las misiones, fray Andrés Jadraque que ve la necesidad de dotar la capilla con un lienzo o cuadro de la Virgen del Rosario, advocación promulgada por la Orden Dominicana a la cual pertenecía el religioso. De esa manera acuden a un pintor también español Alonso De Narváez que vivía en la ciudad de Tunja, en Boyacá, cercana a la región para pedirle que pintara a la Virgen del Rosario. Todos acuerdan poner al lado de la Virgen a sus santos de devoción, san Antonio de Padua y san Andrés por ser el primer patrono del encomendero que solicitaba la imagen y el segundo, del fraile que la había mandado a hacer.

Para el año de 1562 la pintura hecha de algodón indígena que medía 125 cm de ancho por 111 de alto ya estaba en la capilla y allí permaneció por más de una década hasta aproximadamente el año 1574. Por entonces, la capilla, que tenía techo de paja se deteriora por consecuencia de la humedad, al punto que la imagen quedó prácticamente borrada. La imagen estaba en tan mal estado que fue llevada dentro de la misma región a la población de Chiquinquirá, allí fue abandonada en una habitación que muy raras veces fue usada como capilla u oratorio. Se dice que incluso el lienzo sirvió para secar granos al sol.

La crónica histórica (elaborada al año siguiente de los acontecimientos) señalan que en el año 1586 María Ramos, una mujer del lugar, sabiendo que el lienzo había guardado la imagen de la Virgen María, decide reparar el viejo oratorio y el lienzo maltratado, otorgándole el mejor lugar de la capilla. Diariamente oraba y pedía a la Virgen del Rosario que se manifestara, hasta que el 26 de diciembre de 1586 cuando María salía del oratorio, una mujer indígena llamada Isabel junto a su pequeño hijo al pasar por el lugar le gritaron a María: "mire, mire Señora...", al dirigir su mirada a la pintura ésta brillaba con resplandores y la imagen, que estaba irreconocible, se había restaurado con sus colores y brillo originales; los agujeros y rasguños de la tela desaparecieron. Desde entonces empezó la devoción a la advocación conocida como "Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá".

Y ¿Por qué es importante conocer la historia de la Virgen del rosario de  Chiquinquirá?: en primer lugar porque es la patrona de Colombia, en segundo lugar porque precisamente estamos en el mes del rosario, en tercer lugar porque somos Pavonianos y debemos rendir una gran devoción a María, nuestra querida madre y en cuatro lugar porque el pasado sábado 10 de octubre, unos 80 fieles de nuestra parroquia fuimos en peregrinación a visitar ese hermoso santuario boyacense. Además aprovechamos para conocer Ubaté, pueblito denominado “La central lechera colombiana” por su abundante leche y excelente queso y hasta alcanzamos a entrar en la famosa “Catedral de sal” de Zipaquirá, una de las maravillas de Colombia y del mundo entero.

El viaje resultó algo largo y “a las carreras”. Algunos llegamos a casa mareados, otros sedientos,... pero todo ese sacrificio mereció la pena por haber disfrutado una vez más de tantas maravillas que nos regala el Señor y de un bonito  día de convivencia parroquial.