Con vitalidad, ilusión y mucha juventud

El grupo de jóvenes de Vicálvaro "ya se ha puesto las pilas" Un año más, tras las huellas de Cristo, en la escuela de Pavoni... Y qué mejor forma de comenzar que orando, conviviendo y comprometiéndose... 

Orando a Dios porque sin Él "estamos apañados". Porque con Él todo es posible... Orando la vida como un regalo, como nos decía Lola (qué suerte tenerte). Ser pavoniano, ser saiano es un don, un regalo, que no se devuelve... se desenvuelve.

Conviviendo porque ni la edad ni los puntos de vista diferentes son obstáculos... Todo lo contrario, en la divergencia, en la disparidad de ideas encontramos la riqueza, la amistad. 

comprometiéndonos. Con nosotros mismos, con Dios, con los niños... Un montón de actividades para los más peques... Convencidos de que no es tanto el hacer, sino la actitud que debemos adoptar...

Comenzamos... Pedimos a Dios, por intercesión del padre Pavoni, que nos acompañe y nos guíe durante este curso... Que nunca falte ni la ilusión ni una mano amiga...

Esto no ha hecho más que comenzar... ¡Os tendremos informados!