Experiencia de voluntariado jóvenes pavonianos Casa de la Misericordia de San Gabriel (Gr

Recoger en unas breves lineas este regalo del Cielo es sumamente difícil... A modo de crónica os podía contar que comenzábamos esta semana haciendo una parada en el pueblo que vio nacer a Martín Descalzo (Madridejos). Una vez en Granada hemos hecho tres preciosas excursiones (a la ruta del gollizno, a la ciudad de Granada y a las playas de Motril). Finalmente concluíamos estos días en Albacete, donde nuestros hermanos nos acogían estupendamente y nos enseñaban lo mucho y bueno que hacen por la Mancha...

Pero no hay tiempo que perder para contaros que Dios nos ha visitado y nos ha tocado, y de qué forma, el corazón, a través de unas personas maravillosas... Y le hemos podido escuchar a través de unos chicos que nos han enseñado la capacidad del Amor... Porque si bien es cierto que son discapacitados para correr o para estudiar o para muchas de las cosas que hacemos tu y yo a diario, son capacitados y con matrícula de honor para amar, para sonreir, para acoger, para enseñarnos el milagro del Amor (en mayúsculas). Creo que todos hemos sentido durante estos días que la Felicidad (la auténtica) debe ser algo muy parecido "a los enfados de Gorito" o a los gritos de Javi, o a la mirada de Pepito, o a los saludos "cansinos" de David, o a la sonrisa de Marcos o de Iván o... (paro aquí que uno no es de piedra).

Esclavos de María y de los Pobres. A esta Congregación cuyo fundador es el padre Leocadio (Alcuéscar) le agradecemos de corazón, especialmente al padre Paco, el darnos esta gran oportunidad. Agradecimiento que hacemos extensivo a todas y a cada una de las personas con las que hemos compartido estos días (auxiliares, educadores, cocineras, limpieza, lavandería...). Ah, y a ti, Paco (sabes que las chicas te cambiaron el apellido; eras y serás para nosotros Paco Amor) gracias por enseñarnos a no poner límites al poder y a la bondad del ser humano...

Y ya sabéis, os esperamos en Madrid, en Cáceres, o en cualquier otro lugar donde estamos los pavonianos. Seguid trabajando por esos chicos que tanto queremos. Y una última cosa: Perdonad si os zumban los oídos algo más de los normal... Nos veremos pronto... ¡Segurísimo!