Durante los días 15-17 de noviembre, convivencia en el Colegio

Pensábamos que iba a ser el último fin de semana soleado, pero nos equivocamos. En cualquier caso, el Colegio de Valladolid se presta de una manera única, para albergar convivencias de chavales, incluso si hace mal tiempo, ya que las salas, recreos... ofrecen espacio suficiente. Fueron 43 chavales más los monitores de poscomunión, los que se animaron esta vez para la convivencia. Los patios y salones del Colegio, volvieron a recobrar, por un fin de semana, el ritmo al que estuvieron acostumbrados en otro tiempo. Niños corriendo por todos los lados, subiendo, bajando... con ganas de dar guerra. Lo peor, las noches; lo mejor, la espontanteidad y la participación, lo bien que se lo pasaron y  las ganas que ponen en todo lo que hacen. Realmente son chavales únicos, que disfrutan con todos los juegos, actividades, sorpresas, canciones... También hubo momentos para la oración, y para juegos más tranquilos, como los barquitos de otro tiempo, ya que le mal tiempo no nos dejó en paz.

Como actividad estelar, este año hicimos una clásica "liga relámpago" de futbito, en la que los chavales disfrutaron de lo lindo, lo que nos permitió el tiempo. Fuimos el domingo a la Misa Familiar de La Cistérniga, dejando el Colegio para otra ocasión, que seguro que surge.