En la muerte del hno. Pierre y anunciando el Sínodo de los Jóvenes

Queridos hermanos, religiosos y laicos de la familia pavoniana:

Quiero comenzar esta carta dando las gracias a los consejos provinciales que han terminado su servicio a la Familia pavoniana; creo que han trabajado bien, con dedicación y amor, en estos momentos nada fáciles de nuestra historia. Es verdad que habrán podido cometer errores, ¡y quién no los comete!, pero la buena voluntad, disponibilidad y generosidad han prevalecido. Gracias en nombre de todos (religiosos, laicos y destinatarios de nuestra misión). Doy la bienvenida a los miembros de los nuevos consejos provinciales y pongo su servicio bajo la protección de la Virgen Inmaculada y de San Ludovico Pavoni. Como siempre digo, la marcha de la familia depende de todos y cada uno de nosotros; cada uno debe ser responsable de su vida y vocación. A veces, volcando toda la responsabilidad en los superiores y a través de una formación a la dependencia mínima y externa, se crean personas infantiles, sumisas y faltas de una verdadera libertad, que se conforman con un cumplimiento exacto de las normas, pero no asumen un camino personal y comunitario responsable; o, por el contrario, personas que se apartan del proyecto común haciendo un camino personal e individualista. Desde aquí quiero insistir una vez más a los formadores que ayuden a nuestros hermanos en formación a “conformar su vida en cuanto sea posible a la del Divino maestro Jesús”. Esto vale para todos, pues todos debemos estar en formación continua. Los superiores nos pueden ayudar en nuestro camino, pero el camino lo debemos hacer nosotros. No vale escudarse en los otros, aunque sean los superiores: debemos caminar cada vez más hacia una verdadera corresponsabilidad. “Las nuevas estructuras de gobierno, que emergen de las Constituciones renovadas, requieren mucha mayor participación de los religiosos y de las religiosas. De donde surge un modo diverso de afrontar los problemas, mediante el diálogo comunitario, la corresponsabilidad y la subsidiariedad. Son todos los miembros de la comunidad los que quedan implicados en sus propios problemas. Esto cambia considerablemente las relaciones interpersonales e influye en el modo de ver la autoridad. En no pocos casos ésta no acaba de encontrar en la práctica su lugar preciso en este nuevo contexto. (VFC 5 e).

1) En este mes de julio ha muerto nuestro primer hermano pavoniano africano: fr. Pierre Yamb. Quiero hacerme portavoz de sus sentimientos que me expresó en los diálogos que tuvimos. Creo que él es “mensaje de Dios” para todos nosotros.

-          Fe ciega en Dios a través de San Ludovico Pavoni. Consciente de su gravedad, nunca perdió su confianza en Dios. Estaba convencido que San Ludovico Pavoni realizaría el milagro, pero si debía morir, sería voluntad de Dios y no de los hombres. A Dios se confiaba día a día, rezaba y daba testimonio de fe y alegría a los demás enfermos y personal sanitario. Su hermano lo expresó muy bien en la homilía el día de su funeral: “la enfermedad y el sufrimiento no han logrado minar su fe y confianza en Dios”. Si ya no es fácil poner toda nuestra confianza en Dios cuando estamos bien, es mucho más difícil ponerla en la enfermedad y el dolor; él lo consiguió.

-          Gratitud hacia las personas que han estado cercanas a él en su larga enfermedad, comenzando por el p. Giuliano Fedre, superior de la comunidad de Brescia, y siguiendo por los religiosos y laicos que le han visitado en casa o en el hospital, o le han llamado por teléfono. Estaba agradecido a D. Mauro, párroco de Alfianello, y a las personas de su parroquia.  El se sentía muy acompañado y experimentaba la fuerza de la oración de todos.

-          Fiel a su familia de origen y a sus tradiciones. Era africano y se sentía pavoniano africano. Nunca olvidó sus raíces y las supo impregnar de pavonianidad. Siempre que podía, visitaba su tierra y siempre era portador de dones para su gente, siendo él mismo un don y un testimonio como religioso pavoniano. Estaba convencido de que había muchos jóvenes de su tierra dispuestos a emprender un camino de discernimiento vocacional pavoniano. Habíamos hablado de algún proyecto en este sentido. Estoy seguro que su muerte será la semilla de vocaciones pavonianas Camerunenses.

-          Se sentía en familia y entre hermanos. A pesar de las incomprensiones y malos entendidos causados por la diferencia de cultura, se sentía en casa, no se sentía un extraño. Su hermano, en la homilía, dijo: “Al ver esta asamblea reunida en esta celebración, me doy cuenta de que no dejo a Pierre en tierra extraña o abandonado, sino entre hermanos y en casa, entre gente que le quiere de verdad”.

Son todas lecciones que nos pueden ayudar, que Dios ha escrito para nosotros en la vida de fr. Pierre. Estoy seguro que él intercederá por nuestra familia cerca de Dios.

2) Toda la Iglesia está enfrascada en la preparación del próximo Sínodo sobre “los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional. En el próximo boletín interno viene recogida la primera aportación de los superiores generales, está en español, pero creo que se puede entender. Nosotros pavonianos no podemos ser ajenos a este acontecimiento, por eso he invitado a los superiores provinciales a que en las tres provincias se lleve a cabo el año que viene “una consulta de los jóvenes” con los cuales caminamos. Es necesario escuchar lo que los jóvenes tienen que decirnos, sus inquietudes, sus esperanzas, sus proyectos, sus expectativas respecto a nosotros y que nosotros les digamos qué estamos dispuestos a aportarles como pavonianos.

3) Seguimos asistiendo al fenómeno de la inmigración, prófugos, refugiados, personas que siguen huyendo de sus países para encontrar un futuro mejor y más digno, con todo lo que eso conlleva (desaparición de menores no acompañados, trata de personas, falta de acogida, hacinamiento, pobreza, pérdida de dignidad, brotes de violencia…). Es posible que no tengamos ni recursos de personas ni de estructuras para echar una mano, pero desde aquí hago una invitación fuerte a religiosos y laicos al voluntariado. En la medida de lo posible dediquemos algunas horas de nuestro tiempo para colaborar con otras entidades que trabajan en este campo (centros de acogida, comedores para necesitados…). Creo que nos hará mucho bien y daremos testimonio desde nuestro carisma.

Agenda del mes de agosto

-          6: primera profesión de los novicios Filipinos: Reinaldo e Noah;

-          3-10: Campamento egipcio con los niños de la Cistérniga;

-          27 agosto-2 septiembre: Ejercicios espirituales de la provincia Italiana en Lonigo;

-          28 agosto-1 septiembre: Ejercicios espirituales de la provincia Española en Segovia en la casa de espiritualidad de los Carmelitas descalzos.

Pongo el camino de nuestra familia bajo la protección de María, la Virgen de la Asunción, y de San Ludovico Pavoni.

Un abrazo fraterno y siempre agradecido,

                                                                            Ricardo Pinilla Collantes

Tradate, 30 de julio de 2017